Conforme a lo anticipado por la conducción de la Asociación de Trabajadores del Estado, en la víspera se cumplió una jornada de paro y movilización provincial en rechazo al ofrecimiento salarial anunciado por el gobierno de Jujuy, y en demanda de reales paritarias y actualizaciones de los ingresos ajustados a los actuales niveles de inflación. Durante la jornada, de la que participaron autoridades del Consejo Directivo nacional, se multiplicaron las denuncias en torno a los bajos salarios que percibe una mayoría de agentes de la administración provincial que, según se afirma desde el sindicato, llegan a cubrir solo la mitad del valor actual de la canasta básica que ronda los 350 mil pesos.
“Estamos con jornada de paro provincial por 24 horas, en rechazo a este gobierno que ya se está yendo y que no pudo cumplir con los compromisos que habían quedado, como el pase a planta de compañeros, la recategorización, los pases de contratos y otros más que hasta el momento no se cumplieron”, expresaron algunos de los secretarios de las seccionales del interior de la provincia que llegaron a la capital jujeña para acompañar a las electas autoridades del Consejo directivo provincial y de la mesa nacional del gremio, presididas por Rodolfo Aguiar, que llegaron a la provincia para acompañar la protestas de los trabajadores jujeños.
Vale mencionar que la medida de fuerza, que tuvo un alto acatamiento en todas las seccionales de la provincia parte del rechazo al ofrecimiento de recomposición salarial del gobierno de turno, consistente en una recomposición de tan solo el 10 por ciento, y el pago de un bono de fin de año de 100 mil pesos en tres tramos. Los delegados, encabezados por el titular del Consejo provincial, Carlos Sajama, ratificaron que ATE no aceptó la propuesta.
Al mismo tiempo alertaron que actualmente el ingreso promedio de un trabajador de la administración pública ronda los 150 mil pesos, cifra que permite cubrir solo la mitad del valor actual de la canasta básica que, según los organismos oficiales, ronda los 350 mil pesos. Atentos a ello, los referentes del gremio, mencionaron, “la canasta básica supera los 350 mil pesos, y a partir de la lucha que tuvimos meses atrás se logró que los trabajadores tengan un salario inicial de 150 mil pesos, es decir, menos de la mitad”.
“Sabemos que es muy bajo lo que cobramos los estatales de la provincia, por lo que muchos buscan otra cosa para hacer porque es imposible llegar a fin de mes”, afirmaron, para luego reiterar demandas por nuevas instancias de paritarias y recomposiciones salariales acordes a las variaciones de la inflación que releva el mismo gobierno de la provincia.
Por otro lado, se reiteraron planteos en defensa de los puestos de trabajadores del personal contratado que, según se afirma, están en riesgo debido a los cambios de gestión que se prevén en el orden provincial y en las comunas del interior a partir del 10 de diciembre. Al respecto, se aclaró que el gremio se encuentra en “estado de alerta” frente a cualquier situación que ponga en riesgo las fuentes de ingresos de los trabajadores. “Nosotros le decimos no a toda política que perjudique a los trabajadores, o que deje a personas excluidas, o que avance con la pobreza”, destacaron voceros del gremio en clara referencia a los cambios que se anticipan particularmente en el orden nacional, y que podrían extenderse en la administración provincial.
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