Trabajadores de la Salud de Jujuy también rechazan la propuesta salarial del Gobierno
El ofrecimiento de recomposición salarial para los empleados públicos provinciales y municipales, definido por el gobierno de Jujuy, continúa cosechando rechazos y serios cuestionamientos, no solo de parte de los sindicatos, sino también de las agrupaciones de trabajadores autoconvocados, particularmente del sector salud que se muestran indignados con la propuesta.
Prueba del rechazo y malestar que despierta el ofrecimiento del 18% de actualización, en dos tramos, y el pago de un bono de 20 mil pesos, quedó reflejado en la singular protesta que llevaron adelante trabajadores del Hospital Materno Infantil “Héctor Quintar”, que llevaron adelante recientemente la denominada “Olla popular de la indigencia”. La medida tuvo el acompañamiento de enfermeros, trabajadores de la administración, camilleros, personal de servicio y mantenimiento, e incluso profesionales médicos. A ellos se sumaron trabajadores de otros nosocomios que también alertan sobre lo paupérrimo del ofrecimiento del Ejecutivo jujeño.
Durante la “olla popular”, los manifestantes afirmaron que “nuestros sueldos son la mitad, o menos de lo cuesta la Canasta Básica; nosotros trabajamos cuidando vidas todos los días”. Con igual criterio remarcaron que las demandas no parten de una actitud caprichosa, sino que “estamos trabajando, por lo que no pedimos que nos regalen nada, solo necesitamos que se nos reconozcan”.
“Estamos manifestando contra el miserable y paupérrimo aumento del 18% que nos quieren dar”, expresaron los trabajadores durante la protesta que sumó al generalizado rechazo de los empleados públicos de la provincia. Paralelamente cuestionaron la política salarial “discriminatoria” implementada en el sistema sanitario de la provincia que conllevó a que un sector de profesionales médicos reciba un incremento salarial sustancial postergando al resto del personal sanitario.
Atentos a ello, expusieron que “aquí hay aumentos encubiertos para algunos profesionales, mientras que el resto de los trabajadores seguimos cobrando minucias, porque para muchos el aumento que se va a dar solo implican 11 mil pesos, y con eso no llegamos cubrir nada de lo que es la canasta básica que actualmente llega a los 700 mil pesos”.
Las críticas no solo apuntaron a los responsables del gobierno de turno, sino también a los políticos en general que, según afirman “se aumentaron sus millonarios sueldos; ellos, el día del trabajador van a estar comiendo asado, y nosotros no sabemos qué vamos a encontrar cuando lleguemos a la casa”.
Por otro lado, voceros de los manifestantes alertaron que desde el inicio de las acciones de protesta, comenzaron a registrarse presiones sobre los trabajadores en un claro intento por frenar las medidas de fuerza. “Tenemos compañeros a los que se los ha separado de los puestos de gestión, de coordinaciones, compañeros a los que se les dice que si salen a protestar les van hacer descuentos, o se los va a cambiar de sector, y de horario, que van a estar anotando”, relataron.
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