La crisis en el sistema de transporte público de pasajeros en la provincia se mantiene latente a pesar del llamado a conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo de la Nación que buscará un acuerdo paritario entre el gremio UTA y las Cámaras empresariales del transporte del interior del país. Cabe recordar que la medida de fuerza nacional desplegada por el gremio de choferes el pasado martes tuvo un fuerte impacto en la provincia donde los servicios de media y corta distancia se paralizaron afectando a miles de ciudadanos.
A ello se suma la inminente suba del valor del boleto urbano que significará un nuevo golpe al bolsillo de los usuarios.
En dicho contexto, el concejal de San Salvador de Jujuy por el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, Gastón Remy, alertó sobre las deficiencias que presenta el sistema de transporte urbano y la ausencia de políticas concretas desde la comuna para garantizar un servicio adecuado a los requerimientos de la población.
“Hace ya muchos meses que se ven colas interminables en distintos puntos de la ciudad, por lo que vemos la ausencia de soluciones desde las empresas y desde la municipalidad”, describió el edil de la izquierda al dar cuenta de la realidad del servicio que se brinda en la capital jujeña y los padecimientos de los usuarios, especialmente de los sectores más alejados del centro.
A partir de esa primera descripción, recordó que el Municipio y el Concejo deliberante tienen la responsabilidad de controlar la calidad del servicio en aras de garantizar una adecuada prestación de parte de las empresas.
Respecto del conflicto salarial que diera lugar a la última medida de fuerza, acotó que el mismo se origina en las disparidades en la distribución de los subsidios desde el gobierno nacional. No obstante, alertó que en el orden local no se cuenta con información objetiva sobre el destino de los fondos que reciben las empresas de transporte. “En el Concejo Deliberante no se conoce cuál es el impacto de los subsidios realmente en la estructura de costos de las empresas, y esto es porque las empresas no muestran su rentabilidad”, dijo.
Puso de relieve que a pesar de la ausencia de información concreta el municipio dispone de ajustes de tarifas que indudablemente impactan en la población. Vale indicar que prueba de esto último es la decisión de la comuna de autorizar un ajuste que en breve llevará el boleto urbano a más de 53 pesos.
“A los usuarios se les aumenta el aumento, y los subsidios pareciera que no entran en la fórmula para el cálculo de los aumentos y por eso insistimos que los técnicos de la municipalidad deben explicarnos porqué se aumenta el boleto si los subsidios están llegando para aliviar los costos a los empresarios”, expresó el concejal, quien finalmente sostuvo que a pesar de los millones de pesos que se destinan a las empresas se constata que los trabajadores no perciben los ajustes salariales que se fijan en paritarias mientras que los usuarios deben pagar más por un servicio deficiente.
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